lunes, 8 de junio de 2009

Noche de oscuridades



Noche de luna llena, fría noche de oscuras realidades, de ensoñaciones rebeldes, de atracciones heladas...

Noche que llamas suavemente al oído como una dulca melodía, como un reflejo del frío mar que allá lejos estallas contra las rocas y llenas de sonidos tu ribera, y así el alma del que se acerca a contemplarte

Noche de locuras mezcladas de un pensar suave y placentero que lleva a mundos lejanos y sonrisas duraderas...

Estrellas atrayentes dominan bajo las nubes, aquel manto que atrae mi mirada, aquel que esta noche me susurra una y otra vez su secreto, que me llama con un oculto temor a ser diferente, mi noche oscura y querida, presidida por mi querida luna, que en esta noche de dulzura y frialdad, invaden mi pecho, esperando mi respuesta, mi ida, mi llegada.... Deseo entregarme a la noche, y que me recorra con un solo sentimiento, que me tome en brazos y me lleve con ella, solo esta noche, deseo sentir dentro de mi la frialdad y la dulzura que solo una noche de luna llena puede producir...

Nubes oscuras rodean, este mi pensar de oculto reflejo, de oscuro reflexionar, de dulce y muy dulce soñar.... la noche que quiere ser mi guardiana y a la vez mi invasión, noche amante, noche seductora....

Oscuros mantos rodean poco a poco mi existencia y me toman para llevarme al lado de aquella amiga, que esta noche está muy presente, me envuelven y encierran en pensamientos y sobre todo sentimientos, de olvido de lo material, de olvido de lo corporal, soy parte ajena de algo que existe solo en aquello que no se puede tocar, soy seducida por aquella Luna, seducida y derrotada, entregada a su compañía, a su sentimiento, belleza y melancolía....


Dulce, muy dulce noche de melancolía, a pesar de que los sentimientos siguen siendo puros y reales, esta es la noche en que me entrego a la Luna, y ella como una amiga, me devolverá en la mañana, permitirá que vuelva a ser... me dejará seguir


Oscuridad resuelta me recorre, aún me invade, esta noche es de aquellas en que mis ojos se entristecen, pero solo por melancolía, en que mi vida se vuelve algo superfluo, en que soy parte de aquella noche oscura, y muy oscura....


Kazeai.... o más bien.... Tsukiko