jueves, 21 de julio de 2011

Madejas de imágenes en recuerdos...



El aire... trae consigo una madeja de dulces y bellos pensamientos... quizás oscurecidos, quizás un poco patéticos, quizás un poco llorones... es dulce y tonto encontrar una persona que puede aún tener pensamientos como estos, sabiendo que el tiempo pasa por su mente y cuerpo... sabiendo que el dolor y la tristeza pueden convertir en una persona en fuerte... aún así, los pensamientos de colores extraños se esconden de la realidad en este lugar, flotan y llenan todo a su paso...

Las imágenes, los sentimientos, todo cuanto puede ser la base de lo que uno es, se esconde en un mundo tan pequeño como son cuatro paredes, tratando de ser notados, no quieren ser olvidados como lo es todo en la mente de un ser humano... no quiere olvidar que un día fueron algo importante para aquel que los vivió o creó, que fuero algo tan dulce y fresco como un fruta, o que vivieron caminando cada día junto a un ser, sin importar si eran todos distintos.

Los recuerdos pueden ser la base de lo que es una persona, aún así... muchos de ellos pueden ser helados tormentos y cálidas presencias... pueden ser dulces y amables, pueden ser agrios pero queridos... pueden serlo todo... y aún así no quieren salir de estas cuatro paredes...
Saltan y golpean un lado y otro, para que no olvide que son, quieren que los vea, que los escuche... que los viva...

Pero muchas veces, el mirar estas imágenes andantes, muchas veces su presencia puede hacer que el pecho se sienta invadido, de pronto el verlos se vuelve nostálgico y a veces... solo a veces... entristece mirar aquello que fue y que ya no será...

Hay personas que se fueron... hay miradas que ya no existen, sonrisas que se extrañan... caminos que querríamos volver a recorrer... todo dentro de esas cuatro paredes, pareciera que quisieran que ya no volvieran al mundo de las creencias y creaciones, si no que vivir junto a ellos siempre, añorando, extrañando... viviendo un mundo que ya no es... soñando con lo que alguna vez quiso ser o lo que pudo haber sido, queriendo ver los ojos de aquel que no está, sonriéndole a imágenes difusas... abrazando solo aire... Y de ese lugar.... es muy difícil salir...

El ponerse de pié en un lugar lleno de aquellas rememoranzas, es difícil... no se puede simplemente cerrar la puerta y no verlos más... ellos te siguen, a donde quiera que vayas y si vuelves una y otra vez la vista... será difícil dejar de mirarlos... y será aún más difícil ver al frente, avanzar... y seguir sin tropezar...

Hay acaso una fórmula?... hay acaso alguna manera en que cada persona pueda dejar esta masa incorpórea y ya no ver más atrás, si no que mirar el mundo... disfrutar de la belleza de la luz y acogerse en el regazo de la oscuridad... Creo que muchos dicen que hay formas de hacerlo... cada uno da una técnica distinta... pero nunca he escuchado una sola que realmente haga feliz...

Hoy en día... caminar sin mirar atrás, es muy difícil... sobretodo cuando el mundo se vuelve cruel, sobretodo cuando los ojos se empañan... o cuando te quedas solo... pero...

Quizás... solo dejarlo poco a poco... quizás solo fijarse en la belleza que encuentras al frente, quizás solo sonreír a las cosas que se ven tristes... porque así... tal vez y solo tal vez... ya no lo sean tanto...

Si existiera una forma mágica para avanzar en este mundo... ya no sería lindo vivir, no tendría emoción, ni menos sensaciones... es mejor para cada uno, encontrar su propia fórmula... ya sin pedir, ya sin temer al temor... solo ser y seguir... porque esa es la única forma en que el mundo sigue girando... y es lo único que permite a la vida... ser vida...


Kazeai