Odioso pensamiento de aquello que quisiera dejar de ver y escuchar...
Si pudiera controlar cuanto soy y cuanto puedo sentir, el mundo quizás sería más fácil...
Pero, así tonta, y más aun, como alguien que siente, mi interior decide olvidar cuanto hay en mi cabeza y dejar que otras cosas invadan mi pecho... aunque se que no debería, aunque se que tendría que ser fuerte, aunque se que realmente aquello que pasa es una tontería que nunca, y realmente nunca, pasará de ser aquello...
Mi cabeza sigue pensando, pero no puedo dejar de temblar, ese odioso sentimiento que se acomoda en el pecho y que hiere, no quiere irse... a pesar de que el día avanza, a pesar de que no hay una razón aparente para su existencia, sigue ahí, ni si quiera con un motivo... es solo por estar y recordarme que esto que hay dentro de mí, no es solo aquello que quiero que sea, que no puedo programarlo como si fuera una máquina...
Maldito control vencido de mi esperanza y de los sueños... porque... si controlara, dejaría que me llenara de aquello que mi mente piensa que es lo mejor y me alegrara de lo que consigo para eso... pero no, esta tonta y pofiada persona, sigue con otras ideas dentro de sí...
Maldito sentimiento general... si fuera solo una simple idea, si fuera solo sobre una persona, podría eliminarlo, pero no... es la vida... y esta realidad que a veces no se si quiero realmente verla...
Tengo frío...
Un susurro de inconsistencia puede ocultar cuanto es y cuanto quise que pudiera o llegara a ser, el mundo recorre cada instante sopesando la liquidez de su existencia y el peso de su querer, pero ya nada es lo mismo que ellos conocen, por eso las burbujas dejan de ser transparentes, por eso las hojas pueden caer ya sin temor a dañarse, porque en una vida de estas, no es lo que puede si no que más bien es lo que siempre se fue y lo que veo de un reflejo en el cristal...
Tsukiko
No hay comentarios:
Publicar un comentario